11 mar 2013

¡Oído cocina!


Mi madre cocina muy bien, estupendamente diría yo como cualquier madre que se precie pero jamás nos enseñó y jamás le insistí. Tengo 30 años y vivo en pareja de hace unas semanas escasas y mi novio tiene un trauma enorme, su novia no sabe cocinar. Al principio encontraba que era un comentario tonto pero ayer me di cuenta de que realmente es un tema que le preocupa. Toda su familia lo sabe y todos saben cuan preocupado está. ¡Alucino!
Pues a mí me preocupa 0, la verdad. No sabré cocinar un potaje, ni un cocido, ni una carne en salsa pero para las cosas más sencillas me defiendo muy bien. 
Me pregunto yo... ¿Cómo es que ninguno de mis anteriores novios me pusieron pega alguna sobre mi destreza en la cocina? No soy una cocinitas pero me defiendo e incluso tengo interés por la cocina vegetariana (he hecho un curso de cocina). Aunque reconozco que no me apasiona, ni me relaja, ni me conecta. Aunque es otra manera de activar tu creatividad y conectar con tu esencia. Mi esencia, no está conectada con la comida. Ya os lo dejo claro :)

En fin, sé hacer un wook de verduras, un revuelto de huevo, una tortilla francesa (o de atún, o de queso), un huevo frito, una tortilla de patatas, un bacalao con tomate, unas ensaladas de todo tipo (es con lo que más he experimentado) verduras, pasta, canalones de verduras (veganos)… Y hace algunos meses me he aventurado a experimentar con alguna receta dulce. Los postres me fascinan y además es algo que mi novio no es muy dado a hacer, así que yo me atrevo a experimentar. He hecho bizcocho, un pastel de chocolate, galletas, tiramisú, un pastel de calabaza con queso y, ayer me atreví, un pastel de queso.
No se me da mal. Más bien creo que no tiene ningún secreto: un poco de esto, un poco de aquello “et voilà”.
No es que no me guste cocinar, más bien es que no soy de cocina muy elaborada, todo me parece demasiado salado, demasiado cargado y al final acabo con dolor de estómago, así que supongo que no sabría medir las cantidades a gusto (y mezclar cocina con paciencia no es para mí). Prefiero usar la plancha, el wook, el vapor, el horno y poco más.
En fin, como el domingo hice un pastel de queso que encantó a todos, os dejo la receta (sencilla dónde las haya y ¡ re buena!):


terrinas de queso “philadelphia”
terrina de nata para montar
3 huevos
½ vaso de azúcar
3 cucharadas de maizena

El horno a 220º mientras preparas la mezcla y después metes el molde con la masa preparada dentro) y esperas 50 minutos a 180º. La masa sube y al sacarla baja, esperas que se enfríe y después a la nevera.

Os lo prometo que se chuparán los dedos y parecerás una experta. Ahora en casa de mi novio empiezan a tener otra idea de mí y mi novio, aunque lo niegue está más enganchado y tiene esperanzas de reconvertirme: jajaja… Me río y en realidad yo también espero acabar cocinando un poquito como mi madre ;) pero como dice él poco a poco que no tenemos prisa...